Mei

Invitado

Mei

Datos personales

Nombre:Mei
Apodo:Pigeon, entre otros apodos graciosos
Raza:Ángel común
Lugar de nacimiento:Jardín de Buda
Fecha de nacimiento o año en que cayó a la Tierra:Al final de la Dinastía Tang
Profesión (si la tiene): Representante de los celestiales - Mensajera – Protectora de los niños.

¿Cómo eres?

Descripción física:De estatura pequeña, muy delgada con ligeras curvas. Tiene apariencia suave y fresca, piel pálida y un rostro con expresiones sin malicia.
Ojos normalmente negros pero cambian a color blanco en raras situaciones. Pelo muy largo, liso parecido a la seda y oscuro como la tinta china.
Marcas físicas identificativas:Una pequeña imagen de flor de loto en la muñeca izquierda, es invisible al ojo humano. Los pétalos se mueven al mismo ritmo que el corazón.
Carácter/Personalidad:Curiosa, tranquila y amable, en especial con los niños. No le desea mal a nadie. No responde en escenas violentas pero pelearía para proteger. Piensa que las personas merecen una segunda oportunidad para ganarse el cielo. Su mejor amigo es Sushi, una temperamental cacatúa blanca con complejo de águila.

Otros datos…

Habilidades: Kung Fu. Ser invisible, entre otros.
Armas favorita: Hace aparecer largas mágicas sedas blancas que los usa principalmente como escudo.
Pasatiempos: Tocar el guzheng (piano en cuerdas), practicar caligrafía china, meditar.
Gustos y Odios: Le gusta danzar y montar a caballo. Ama la naturaleza, se pone feliz cuando le regalan flores. Se frustra cuando tratan de ignorarla.
No le gusta oír gritos y la violencia.
Canción favorita: If Everyone Cared - Nickelback
Frase favorita: "Si los sentimientos negativos se acumulan, el flujo del mundo será negativo. Inversamente, si los sentimientos positivos se acumulan, el flujo del mundo será positivo."

Historia

Desde el infinito reino celestial, la gran palma de Buda dejó caer hacia la tierra, cristalinas gotas de Agua de la Vida, de ese mágico líquido tocó en una semilla. Al paso de los días una pequeña planta fue creciendo hasta formar una flor de loto. Buda a ver la obra de la naturaleza, elevó la planta hacia su mano con sumo cuidado. Poco a poco los pétalos fueron abrieron, en el centro estaba sentada una criatura, una pequeña y joven mujer de pelo negro con un conjunto de ropa totalmente de blanco.

Sonrió satisfecho al verla. Era físicamente perfecta.

-Pequeña Mei, ya puedes despertar.
Obedientemente levantó la cabeza y abrió los ojos concentrándose al hombre sonriente.
-¿Recuerdas cuál es tu misión?- le preguntó amablemente sabiendo cual sería su respuesta.
-Soy las manos de mi maestro sobre la tierra, estoy aquí para servir a los designios del creador.
Buda se rió alegremente, respondiéndole
-Respetuosa y educada, muy bien, procede.
- Nuestro deber es destruir a todos los demonios que causan estragos en el mundo. Librarnos de la maldad y guiar a las personas por el camino del cielo. Amén.

Mientras la raza humana evolucionaba, las personas fueron empeorando, la bondad era reemplazada por la crueldad. Más y más, la maldad se iba exparciendo por los rincones de cada ciudad y con el temor de perder la guerra divina, le otorgan a Mei como representante de los celestiales para ayudar a Dios y ángeles a purificar el mundo.

Tema: Re: Mei Mar Mayo 29, 2012 11:02 am

ACEPTADA.